Frase de la semana

Antes de iniciar la labor de cambiar el mundo, da tres vueltas por tu propia casa

martes, 5 de febrero de 2013

PAN INTEGRAL CASERO

(Reedito la entrada mejorando las explicaciones del paso a paso. Va por tí Amelia!!!)

Viendo el otro día las entradas de Javi y Amelia sobre las medias verdades que nos cuentan en muchos alimentos que compramos, como por ejemplo el pan integral (que no es integral, porque está hecho con harina blanca-refinada a la que añaden un puñado de salvado). Pues se me ocurrió que podía compartir la receta de pan que últimamente estoy haciendo y que poco a poco voy mejorando.

Así que ahí va por si os interesa, es un pan sencillo de hacer, no requiere mucho esfuerzo ni muchos utensilios -que a veces es lo que nos tira patrás a la hora de hacer pan en casa-. No hace falta ni amasadora, ni piedra de hornear, ni banneton para el levado, ni un molde especial, ni na de na... sólo hace falta un poco de tiempo y ganas.

Lo que obtenemos es una pan de miga densa y compacta, con mucho sabor. Nada que ver con los panes de molde integrales que podemos encontrar ahí, a mí me recuerda a los panes que he comprado en ocasiones en el herbolario a precio de jabugo...

Los ingredientes son muy sencillos y económicos: 
- 1/2 kilo de harina integral
- un sobre de levadura de panadería o un cubito de levadura fresca
- agua templada, la que admita, pero más o menos un vaso
- una pizca de sal, entre 3-5 grs.
- un chorrito de miel (ayuda a actuar a la levadura pero no es un ingrediente indispensable)
- una cucharada sopera de aceite de oliva virgen extra (o cualquier otro que queráis)
- opcional: semillas de sésamo, de amapola, avena, pipas, etc...

Herramientas:
- un bol para mezclar
- un trapo limpio y húmedo
- un molde tipo cake
- opcional, papel vegetal o de hornear para forrar el molde
- nuestras manitas
- y evidentemente un horno

Elaboración:
1. Ponemos en el bol la harina y la levadura, si es fresca la desmenuzamos con la mano o la diluimos con un poco del agua templada. Mezclamos con la mano.

2. Añadimos la miel y la cucharada de aceite. Mezclamos con la mano.

3. Añadimos poco a poco el agua, no echar toda de golpe porque es necesario ir viendo el agua que admite la masa, esto depende mucho de la harina. Seguimos mezclando con la mano.

4. Añadimos la sal, no la pongo al principio porque según he leído por ahí no es bueno que la levadura entre en contacto con la sal. Seguimos mezclando hasta obtener una masa lisa y que no se pegue mucho a las manos.

5. Sacamos del bol y amasamos sobre la encimera o la tabla de cocina. Yo suelo amasar sobre unos 5 minutos, pero hay veces que no tengo mucho tiempo o no tengo ganas y amaso lo justo, hasta que la masa está un poco elástica.

6. Pasamos la masa al bol donde hemos hecho la mezcla y dejamos reposar cubierto con un paño húmedo. El tiempo de reposo dependerá de la humedad y la temperatura ambiental, pero más o menos tiene que reposar hasta que doble su tamaño.

7. Hacia el final del reposado de la masa precalentamos el horno, yo lo pongo a 240º, calor arriba y abajo y con el ventilador. En ese momento meto en la parte más baja del horno una fuente de pyrex con agua para conseguir que haya humedad dentro del horno cuando horneemos el pan.

8. Pasado el tiempo de reposo, sacamos la masa del bol y volvemos a amasarla para desgasificar la masa. Pasamos la masa al molde donde la vamos a hornear, que previamente he forrado con papel vegetal para facilitar el desmoldado del pan (tan fácil como tirar del papel).
Llegados a este punto podemos hacer dos cosas: o bien horneamos directamente la masa tal cual está o la dejamos levar de nuevo y la horneamos.
Yo he probado a hacerlo de las dos maneras y la verdad, no encuentro grandes diferencias en el resultado final.

9. Metemos el molde en el horno, altura media, bajamos la temperatura del horno a 180º, apagamos el ventilador y dejamos calor sólo en la parte de abajo del horno. El tiempo de horneado más o menos es de 40 minutos. Pero lo del tiempo y la temperatura depende mucho de cada horno, es cuestión de ir probando.

10. Pasados los 40 minutos podemos comprobar que está hecho pinchando el pan con un brocheta y viendo si sale seca. Si ya está lo sacamos y en cuanto podamos manipular el molde sin quemarnos lo desmoldamos y dejamos enfriar el pan sobre una rejilla. 

Yo corto todo el pan en rebanadas y lo congelo en bolsas, así por la mañana cuando desayuno saco dos rebanadas de pan y las pongo directamente en la tostadora. Mmmmmm bueníiiiiiiisimo!!!

IMPORTANTE cortar el pan cuando está completamente frío, sino se rompe un montón.

En esta ocasión le añadí unas semillas de sésamo antes de hornearlo.

Et voilà!!!
   



No he probado todavía pero seguro que con esta misma receta se pueden hacer panecillos para preparar bocatas, o una hogaza de pan redondo y grande... es cuestión de ir probando.

PD: tengo que mejorar la fotografía y los estilismos ;)

¡¡Hala!! a hornear se ha dicho


15 comentarios:

  1. OOOhhhhhh!!!! que maravilloso!!! gracias por compartir la receta! no tardaré nada en hacerla! que buenooooooo!!!! Un beso guapa!

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Cachis la mar, me has tentado con tus madalenas de queso y arándanos. He acabado haciendo un bizcocho de manzana... y he comidoooooo :(

      Me debes una clase de ciclo... ;)

      Eliminar
  2. Se me hace la boca agua sólo de leer la receta. Me la imprimo y la hago rápidamente. Hoy mismo he estado buscando recetas vegetarianas porque ya no aguanto más ni la carne del pollo. Así que ese pan será un complemento perfecto para mi nueva vegana way of life!

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Que fuerte que fuerte!!! vegetariana, y que pasa con las "turrás"??? Las tendremos que cambiar por "turrás de verduritas", este año el Carnaval de Villar tendrá doble entierro de morca eh? ;))

      Jajajaja!!!

      Eliminar
  3. Wooow Maríaaaa porque me haces esto, tan rico que se ve y yo sin horno :'c ojalá cuando lo arregle me salga tu receta y pueda disfrutarlo :D ¡Muchas gracias por compartir!

    Besos♥

    ResponderEliminar
  4. Seguro que sí te sale Adriana, si me sale a mí que soy un desastre en la cocina...

    Otro beso!!! ;)

    ResponderEliminar
  5. Estooo... el paso 7, ¿no debería ir detrás del paso 8? es que da la sensación de que tienes que meter la masa en el horno dos veces... no lo he entendido bien. Y eso que tengo ganas de probar a hacerlo (aunque preferiría no ponerle miel, la verdad).

    A ver qué me cuentas, del paso 7.

    Besos.

    ResponderEliminar
  6. Ahora que lo vuelvo a leer es verdad que no me he explicado bien.

    En el paso 7 la masa está reposando y es cuando enciendo el horno, hacia el final del reposado. Y lo que quiero decir es que en ese momento enciendo el horno a tope y cuando meta el pan (pasó 8) bajo la temperatura a 180.

    Pero vamos, que no sé si me entenderás porque me estoy explicando con el cu... Estoy muy espesa, si no te aclaras me lo dices y lo vuelvo a intentar.

    PD: yo no estoy nada Zen...trada ;)

    Besos!!!

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Lo dicho muy espesa, he puesto pasó 8, en lugar de paso 8.

      Eliminar
    2. :-)))

      Bueno, pues la teoría panificadora ya la tengo. Ahora a ver si un día de estos me animo y hago un pan. Mi segundo pan (mi primero fue con 9 años, creo que ya conté el fracaso, ja ja ja).

      Eliminar
  7. hola guapis¡¡
    muchas gracias por visitar mi blog desde hoy yo tanbien te sigo aqui estoy para lo que necesites¡¡¡
    por cierto vaya pinta el pan, me copio la receta para hacerlo a ver q tal me sales ya te contare¡¡
    besotes y gracias de nuevo

    ResponderEliminar
  8. Gracias a tí y bienvenida a este "mundillo"...

    ;)

    ResponderEliminar
  9. Con esta receta puedes hacer lo que quieras! Es básicamente la misma que uso yo para el pan (la única diferencia es que no le pongo miel) y queda buenísimo.
    Hago panes grandes, bollitos, lo uso como masa para pizzas... Vamos que todo lo que se te ocurra se puede hacer. Le puedes poner semillas o especias, o saborizarlo friendo el aceite en una sarten con un ajito y añadiendole orégano, cebollita picada muy finita... Dan ganas de estar todo el día haciendo panecillos distintos jeje.
    Yo también he hecho la prueba de dejarlo levar una o dos veces y la diferencia es mínima, sólo noto que con dos levados la miga queda un poquito más esponjosa por dentro, aunque en mi experiencia lo más importante es la levadura que uses, con una buena levadura da igual el tiempo de levado que el pan queda perfecto.
    Un besote!
    Belén

    ResponderEliminar
  10. Hola Belén, tomo nota de tus ideas.

    Muchas gracias por pasarte y comentar.

    Otro besote para tí!!!

    ResponderEliminar
  11. Buenas! Qué pintorra! A mi siempre me da pereza por lo trabajosas que suelen parecer las recetas pero este parece más asequible en lo que a tiempo y esfuerzo se refiere ¡¡A lo mejor me animo! :D

    ResponderEliminar

¡Gracias por dejar tu comentario!